Ante el repunte de casos nuevos por COVID-19 debido a las bajas temperaturas que se han registrado en los últimos días, el Gobierno de la Ciudad de México (CDMX) ordenó el cierre de los perímetros A y B del Centro Histórico, con excepción de farmacias, hoteles y negocios que venden comida para llevar.
Lo anterior constituye parte de las nuevas restricciones ante el aumento de contagios por el virus SARS COV-2 y sus variantes OMICRON.
Estas disposiciones tienen como fin evitar las aglomeraciones de personas por las compras decembrinas por lo que de inmediato la policía capitalina llevó a cabo rondines de verificación, para obligar a la ciudadanía a que tales medidas se cumplan.
Se colocaron nuevos retenes para reducir el acceso de personas a los referidos perímetros y se amplió el número de calles que estarán cerradas a la circulación de vehículos.
Por su parte la Jefa de Gobierno Claudia Sheimbaum, dio a conocer que se cancelaron los permisos para la colocación de puestos ambulantes en esta época para tratar de evitar más contagios por COVID-19.
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