El ex Secretario Ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE), Edmundo Jacobo Molina consideró necesario refrescar, renovar y provocar a la democracia con formas de democracia directa, siempre y cuando no se abuse de la misma, ya que esto deteriora las verdaderas formas de democracia representativa.
Dijo que a democracia participativa como la directa deben ser cercanas e ir tomadas de la mano, ya que ambas son perfectibles y la voluntad del pueblo es la que debe dar la ruta para su perfeccionamiento, coincidieron expertos que participaron en el tercer día del Foro Global de Democracia Directa Moderna 2023.
Al participar como experto en la Conferencia plenaria ¿Cómo debería encontrarse la democracia directa con la democracia participativa y representativa?, en la que también participan los especialistas Alejandro Monsiváis (México); Ariel Avilés Marín (México); Gema Morales Martínez (México); Johana Fandiño (Colombia); Mauricio Merino Huerta (México) y Won O. Chong (República de Corea), el primero en pagar las primeras consecuencias del Plan B de Reforma Electoral, dijo: “Estos abusos de discursos autoritarios han querido usar reglas no claras de la democracia directa para imponer sus discursos y oscurecer el debate en torno al futuro de cualquier sociedad”.
Sin embargo, reconoció que la democracia directa es un buen instrumento que puede ser utilizado en decisiones que afecten directamente el quehacer cotidiano de la población, pero que debe estar precedido por debates amplios en donde pueda participar la ciudadanía antes de poder emitir su opinión.
En el Salón Asia del Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México, el ex Secretario Ejecutivo aclaró, que es necesario que estos ejercicios democráticos estén a cargo de una organización imparcial para verificar que el resultado sea, efectivamente, la voluntad ciudadana.
Durante el tercer día de trabajos del Foro Global de Democracia Moderna Directa 2023, los expertos concordaron en que los instrumentos que brinda la democracia directa son una oportunidad ciudadana para tratar preocupaciones públicas, donde convergen mecanismos de democracia directa y participativa a través del voto.
“No todas las personas participan con la misma información y desde la misma posición social y libertad para opinar y actuar, ni desde los mismos privilegios”, añadieron los panelistas.
Citaron como ejemplo que conceptos como el plebiscito o referéndum no están homologados tanto a nivel nacional como internacional, ni se cuenta con una uniformidad de conceptos y procedimientos.
Por ello, coincidieron en subrayar que tanto la democracia participativa como la directa deben ser cercanas e ir tomadas de la mano, ya que ambas son perfectibles.
En la tercera jornada del Foro Global de Democracia Directa Moderna se plasmaron Breves historias de democracia alrededor del mundo y se llevaron a cabo los paneles ¿La Democracia Directa puede responder o no a la crisis de democracia representativa?; ¿Cómo transitamos hacia la democracia directa?; ¿La Democracia Directa amenaza los Derechos Humanos o provee una forma para protegerlos?; La manipulación silenciosa de la democracia directa; ¿La democracia directa puede dar poder de toma de decisión a las y los jóvenes?; Desempeño de los Organismos electorales en ejercicios de democracia directa; ¿Qué ha visto México de la Democracia Directa? Testimonios mexicanos sobre ejercicios de democracia directa; y Democracia Directa ¿Cómo incluir a quienes han sido subrepresentadas/os y discriminadas/os? y la Conferencia plenaria ¿Son los tribunales lo suficientemente duros para la democracia directa?.