*El Día Mundial de la Pesca busca reconocer a los pescadores; en México hay olvido
*Legisladores tienen una «deuda histórica» con las comunidades pesqueras del país
JUAN GARCÍA HEREDIA
Al señalar que en México los pescadores enfrentan el deterioro del 34 por ciento de las pesquerías, la organización Oceana recalcó que el Congreso de la Unión ha abandonado al sector pesquero por décadas, pese a su papel fundamental en la seguridad alimentaria del país.
El Día Mundial de la Pesca (cada 21 de noviembre), es una fecha que busca reconocer la importancia de las comunidades pesqueras y su contribución a la alimentación mundial, en base a datos de la agrupación, la cual puntualizó que las casi 300 mil familias mexicanas que dependen de la pesca ribereña no solo proveen sustento a sus comunidades, sino que son pilares fundamentales para garantizar el acceso a proteína de calidad para la población.
«Sin embargo -subrayó Oceana-, pescadores y pescadores enfrentan el deterioro del 34 por ciento de las pesquerías, según la Carta Nacional Pesquera, lo que pone en riesgo esta importante fuente de alimentación sin leyes que atiendan esta problemática».
Conforme a un comunicado, la directora ejecutiva de Oceana, Renata Terrazas, declaró: «El Congreso de la Unión tiene una deuda histórica con las comunidades pesqueras para fortalecer al sector. Está en sus manos aprobar el presupuesto suficiente para que las instituciones del Estado puedan operar de manera adecuada de mano del sector y se garantice el derecho a la alimentación de todas y todos los mexicanos”.
«No podemos hablar de celebración cuando las y los pescadores, quienes alimentan al país, carecen de un marco legal que proteja su actividad y garantice la recuperación de las pesquerías. La discusión y aprobación del presupuesto es un momento clave para atender las necesidades de la pesca”, añadió.
Por otra parte, Oceana, organización dedicada a la protección de los océanos, dio a conocer que en 2021 presentó un amparo en contra del Congreso de la Unión por omisión legislativa, al no incluir en la ley mecanismos para la restauración de pesquerías deterioradas, sobreexplotadas o en riesgo, lo que viola tanto el derecho a un medio ambiente sano como el derecho a la alimentación, ambos reconocidos en el artículo 4 constitucional.
«El caso presentado por Oceana se encuentra actualmente en la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, donde se analiza por posibles violaciones a derechos humanos fundamentales. La organización busca que se reconozca la omisión legislativa y se ordene al Congreso incorporar disposiciones claras para la restauración de pesquerías», destaca el comunicado.