El brote de sarampión que se desató en los Estados Unidos, ha causado una situación de alerta, que movilizó a diversas organizaciones de la sociedad civil, tras haberse registrado una segunda muerte por esta causa de un niño en Texas, estado en donde se localiza el epicentro del brote de la enfermedad, que continúa creciendo pese al cerco sanitario que las autoridades han establecido para controlar el padecimiento.
Ante esta situación el secretario de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, Robert, F. Kennedy jr, viajó hasta una comunidad de menonitas, donde se ha registrado el brote más fuerte de la peligrosa enfermedad que ha causado ya la muerte de dos menores, uno de ocho años y el otro de seis años de edad.
En lo que respecta al segundo de los fallecimientos, el reporte médico de la segunda defunción señala que el niño de seis años de edad, murió de insuficiencia pulmonar relacionada con el sarampión, y que no presentaba afecciones subyacentes.
A este respecto, Aarón Davis, portavoz del sistema de salud del estado de Texas, informó que antes de fallecer, el niño estaba bajo tratamiento por complicaciones relacionadas con el sarampión y hasta el momento el brote más fuerte de la enfermedad se ha registrado en una guardería de Lubbock,
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