A los senadores del Movimiento de Regenración Nacional (MORENA) solo les falta un voto para alcanzar la mayoría calificada y aprobar la Reforma Judicial, solo que en su afan por validar esta iniciativa del saliente Presidente Andrés Manuel López Obrador, no han guardado las debidas formas y esto daría elementos a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para invalidar dicha reforma como ya ocurrió con las llamadas Plan A, Plan B y Plan C, pues no hay que olvidar que sobe el Senado de la República pesa una sentencia judicial de suspender la revisión de la Reforma Judicial, lo que ha hecho caer en desacato a los 63 senadores del blodque de la 4T, lo cual fortalece al máximo tribunal del país para actuar en consecuencia conforme a Derecho.
De ser así quedarían enfrentados los Tres Poderes de la Unión, por lo cual podrían suscitarse el siguiente escenario: el Presidente en funciones ordenaría a la aplanadora de Morena juicio político contra la Suprema Corte, disolvería las cortes y en su calidad de Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas ordenaría al Ejército y a la Marina, tomar posesión de los edificios judiciales y al no haber condiciones suficientes de garantía de la paz social, la Presidenta Electa, Claudia Sheinbaum Pardo no podría ascender a la máxima investidura el 1 de octubre y López Obrador se mantendría en el poder por tiempo indefinido teniendo de su parte a la mayoría de legisladores del Congreso de la Unión.
Por otra parte en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJ) no han podido resolver el tema de las más de mil impugnaciones, y mientras esto no suceda, técnicamente es artificial la actual composición del Congreso de la Unión y dada la efervescencia política, los integrantes del Tribunal han tenido que trabajar en sedes alternas, tal como lo hiciera la Cámara de Diputados en un gimasio y el Senado de la República podría sesionar inclusive en un conocido hotel del Paseo de la Reforma.
Además de no resolverse en tiempo y forma las impugnaciones, la Suprema Corte podría atraer los casos para resolverlos y esto enfrentaría todavía más al actual gobierno con la Corte, tan es así que su ministra presidenta, Norma Piña, ha instruido a la morenista Lenia Batres Guadarrama, para que trabaje en torno a la Reforma Judicial, lo que ha puesto en serios aprietos a la simpatizante de la 4T, la cual tendrá que asesorarse con expertos en materia judicial para salir airosa del compromso donde los ojos de la mayoría de ministros estarán puestos sobre ella.
FOTO DEL DIARIO EL PAÍS
