*El Poder Ejecutivo envió esa iniciativa a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión
JUAN GARCÍA HEREDIA
El Gobierno de México busca que 2025 sea nombrado el «Año de la Mujer Indígena», para lo cual envió esa iniciativa a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, con miras a que los legisladores hagan esa declaratoria.
De acuerdo con informes camerales, el organismo legislativo recibió la propuesta presidencial y la envió a la Comisión de Gobernación y Población de la Cámara de Diputados, destacando que, durante 2025, en toda la documentación oficial de la Federación se inscribirá la leyenda “2025, Año de la Mujer Indígena”.
Además, con estricto apego al principio de distribución de competencias, se invita a las entidades federativas, municipios y demarcaciones del territorio nacional, a adherirse a la presente declaratoria, señalan las referencias.
Destacan que el Poder Ejecutivo Federal, por conducto de la Secretaría de Gobernación, en coordinación con los Poderes Legislativo y Judicial federales y los órganos públicos autónomos, establecerá un programa de actividades para conmemorar y honrar la obra de la mujer indígena en favor de la patria.
A efecto de cumplir con el compromiso y convicción de garantizar la igualdad sustantiva de las mujeres, se sugiere honrar a la mujer indígena a lo largo del año 2025, con el fin de restituir el lugar histórico que le corresponde y demostrar que sus ancestrales saberes se mantienen vivos y revitalizados en lo más íntimo de los corazones de los pueblos originarios, según datos facilitados por la Cámara Baja.
Subrayan que la vigencia de las culturas de los pueblos indígenas impulsa una modernidad alternativa, plural, democrática, comunitaria, diversa, de valores solidarios, de una visión comprometida con la naturaleza y el medio ambiente.
Con esta acción, resalta, se busca erradicar las condenables actitudes discriminatorias que, en el caso de las mujeres indígenas, se agudizan por su calidad de mujer, por su tono de piel y por formar parte de alguna nación indígena. Dichas conductas hablan de un exacerbado machismo, xenofobia y racismo que son inaceptables en el humanismo mexicano.