De acuerdo a información de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), el incendio ocurrido en una bodega de maderas de la Central de Abasto (CEDA), fue intencional, toda vez que cámaras de seguridad de la Unidad de Inteligencia C-5, captaron el momento en que un hombre subía sobre una escalera para arrojar desde la calle un objeto con que las autoridades presumen que la bodega se incendió.
El sujeto fue detenido posteriormente por haber cometido delitos contra la salud, pero las autoridades comprobaron que había sido este hombre el que había arrojado el objeto incendiario, ya que sus ropas, gorra y aspecto físico al momento de ser capturado coincidían plenamente con las características del tipo que las cámaras de seguridad grabaron.
Añaden que, como consecuencia de lo anterior, el fuego se propagó e incendió más de cinco metros de mercancías inflamables, y para sofocar el fuego se tuvieron que emplear más de 200 bomberos y más de cinco horas para poder apagarlo.
El presunto incendiario fue identificado como Marco Antonio N. de 36 años y trascendió que este hombre lo que deseaba era cobrar venganza derivada de una disputa con sus familiares por la propiedad del predio donde la bodega se encuentra.
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