La tos y el dolor de garganta no siempre son consecuencia de una infección respiratoria, porque podría ser un caso de reflujo laringofaringeo, lo mejor es acudir con un otorrinolaringólogo o bien coméntale a tu médico de confianza la información que leerás a continuación.

Aunque no lo creas, el reflujo laringofaringeo, está presente hasta en el veinte por ciento de las personas que acuden a consulta con el otorrino, con síntomas de tos crónica, carraspeo y dolor de garganta crónico, casos en los que el consumo de antibióticos podría ser contraproducente.

A este respecto, el Doctor Sergio Caretta Barradas, otorrinolaringólogo, y consejero secretario del Consejo Mexicano de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, comentó en conferencia de prensa que es común en la consulta que el paciente señale que tiene algo atorado en la garganta y que presente congestión nasal, dolor de garganta tos crónica y mal aliento.

Algunos médicos confunden este tipo de reflujo con una infección respiratoria y prescriben antibióticos que en poco o nada le ayudarán y por el contrario hasta podrían ser nocivos por la resistencia microbiana que pueden generar.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que para el año 2050 la resistencia microbiana causará más muertes que el cáncer.

“Es sumamente importante acudir con médicos calificados para hacer la diferenciación entre una infección respiratoria y el reflujo laringofaríngeo para tener un manejo adecuado, ya que no todo el dolor de garganta es infección”, recordó el especialista.

El Dr. Caretta detalló que el reflujo gastroesofágico se presenta cuando el contenido del estómago regresa hacia el esófago, mientras que el reflujo laringofaríngeo es cuando este contenido se regresa hacia estructuras más allá del esófago, como la laringe, la parte posterior de la garganta incluso puede llegar a los oídos y hasta la nariz. Desde hace 35 años que existe esta diferenciación entre estas dos patologías.

El reflujo laríngofaríngeo es más común en pacientes de 50 años, pero se puede presentar desde los 40 hasta los 60 años en promedio; es más común en mujeres y se asocia comúnmente con nuestros hábitos alimenticios y el sobrepeso que tiene la población.

PRESENTAN EFICAZ TRATAMIENTO

Por su parte el doctor Genaro Vázquez Elizondo, gastroenterólogo en ONCARE Gastrocenter y presidente de la Sociedad de Gastroenterología del Estado de Nuevo León, dijo que el diagnóstico del padecimiento reflujo laringofaríngeo requiere de estudios para corroborar su diagnóstico como la laringoscopía, endoscopía superior y la phmetría ambulatoria con impedancia.

En los pacientes en los que se ha identificado el reflujo ácido como causa de los síntomas, se utilizan medicamentos para controlar esta condición. Los medicamentos con mayor eficacia y seguridad son los inhibidores de bomba de protones (IBP’s).

Actualmente existen tres generaciones de IBP’s con propiedades bioquímicas y farmacológicas distintivas, que implican diferencias en su efectividad y, por tanto, explicando por qué se ha descrito que existe hasta un 40% de pacientes con respuesta inadecuada.

Ilaprazol, es el único IBP de tercera generación que ofrece una rápida, potente y duradera supresión del ácido con una sola toma al día, lo que representa una mayor acción a menores dosis y una alternativa con características favorables para tratar el reflujo laringofaríngeo. 

Estudios publicados recientemente demostraron que Ilaprazol a dosis de 10 mg alivia los síntomas en pacientes con reflujo laringofaringeo.