En una España convulsionada por los temas electorales, el presidente del Gobierno Español, Pedro Sánchez, decidió disolver el Parlamento y convocar a elecciones generales para el 23 de julio, antes de que concluya el periodo ordinario, previo acuerdo con el Rey Felipe VI, esto tras los resultados de los comicios regionales donde el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) recibió fuertes reveses.
De acuerdo a la información difundida por la cadena CNN Noticias en Madrid, el PSOE perdió los comicios regionales y municipales, sobre todo en las regiones de Valencia, Aragón y Baleares, así como en Extremadura uno de los bastiones más importantes del socialismo español.
Asimismo, en ciudades como Valencia y Sevilla, en las que también se eligieron alcaldes, el Partido Popular, identificado como conservadurista, logró la mayoría de los votos, lo que confirma que el pueblo español está harto del socialismo y de lo que significa.
En Madrid, la capital del país el Partido Popular también se llevó la victoria excepto en Barcelona, donde la diferencia de votos fue tan estrecha, se necesitará de un acuerdo con los socialistas para desbancar a la actual alcaldesa, la socialista Ada Colau.