*A pesar de eso, persiste el decreto que lo prohíbe a partir de abril de 2024
*Autoridades debían dar una prórroga, dice el líder Luis Eduardo González
POR JUAN GARCÍA HEREDIA
El sector agroquímico de México exigió dar reversa al decreto presidencial que prohíbe el glifosato a partir del 1 de abril de 2024, pues hasta el momento no hay ningún producto que iguale a este herbicida, el cual –se dice- es vital para aumentar la producción agrícola.
Dicho decreto “significaría un golpe mortal para la agricultura mexicana”, según un comunicado con fecha 22 de diciembre de 2023 de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos (UMFFAAC) que aglutina a industriales en materia de protección de cultivos. El organismo demandó que se dé marcha atrás a esta disposición.
Y es que, de acuerdo con el presidente de esa agrupación, Luis Eduardo González Cepeda, el glifosato evita que las malezas compitan por los nutrientes y la luz del sol, pero en especial por el agua, recurso que este año se vio disminuido significativamente por la sequía y hasta ahora no hay ningún producto que iguale al herbicida en eficiencia, costo, facilidad de manejo, además de que es altamente seguro.
En base al dirigente, el pasado 16 de noviembre la Unión Europea aprobó el herbicida para ser usado por 10 años más, tras evaluaciones de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA). Estos organismos determinaron que el glifosato no representa un riesgo para la salud de las personas ni para el medio ambiente.
El líder de la UMFFAAC en México llamó a las autoridades que se oponen al uso del glifosato a presentar pruebas científicas concretas que respalden los supuestos daños a la salud asociados con el herbicida.
Sin evidencia científica y fehaciente del supuesto daño del herbicida, el decreto es injustificable y contraproducente para el sector agrícola del país, consideró.
“No se ha presentado ninguna alternativa viable, eficiente, económica y efectiva para sustituirlo. No se puede prohibir por capricho y menos en la situación que estamos viviendo donde los recursos como el agua son cada vez más escasos”, expuso en el mencionado escrito.
González Cepeda manifiesta que el decreto debería, por lo menos, tener una prórroga hasta que las autoridades muestren la evidencia científica o una alternativa viable de otros productos para sustituir al glifosato.