El cáncer de próstata es un silencioso enemigo, pero muy letal, ya que por lo general suele presentar síntomas cuando ya se ha propagado a otras partes del cuerpo y su control resulta muy complicado.
De acuerdo a información de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, el cáncer de próstata es una enfermedad que distorsiona el funcionamiento celular de este órgano reproductor del sexo masculino y según estadísticas al respecto, se presenta en individuos mayores de 50 años de edad.
Algunos de los síntomas suelen ser no peligrosos, como el orinar con más frecuencia de lo normal, sobre todo durante las madrugadas, y surge como consecuencia del crecimiento de la próstata. A este trastorno se le conoce como hiperplasia prostática benigna.
Sin embargo existen otros síntomas con los cuales se debe considerar un riesgo mayor, tales como dificultad para orinar, flujo de orina debil o interrumpido, dificultad para vaciar la vejiga urinaria por completo, dolor o ardor al orinar , aparición de sangre en la orina o el semen, así como dolor persistente en la espalda, caderas o pelvis.
Si presentas alguno o varios de estos síntomas, aun siendo menor de 50 años debes acudir con un especialista en Oncología y consultar con este profesional de la salud la conveniencia de que te realicen un examen de tedtección de cáncer de próstata, lo cual te puede llevar a graves complicaciones de salud si el diagnóstico no es preciso.
Para detectar el cáncer de próstata, habitualmente se efectúan dos pruebas, una es la del Antígeno Prostático Específico y la otra es el examen rectal digital, donde el médico introduce en el recto del paciente, su dedo enguantado y lubricado para palpar la póstata y detectar protuberancias.
La Prueba de Antígeno Prostático Específico, que consiste en un análisis de sangre llamado examen de PSA, no es del todo precisa porque aunque resulte positiva no es garantía de que el paciente tenga cáncer y por ese simpe hecho pudiera ser sometido a quimioterapias que resultan muy agresivas para las personas sanas, de ahí la importancia de confirmar el diagnóstico con un examen rectal digital e incluso con una biopsia, que consiste en extraer un pedazo del tejido del paciente para obtener células cancerosas.
FOTO DE LA VANGUARDIA