Por IRENE LICONA OCAÑA
Partiendo de que la sal y la pimienta son el condimento indispensable para enriquecer el sabor de cualquier tipo de comida, La Poblanita de Tacubaya ha decidido extender su presencia en el mercado gourmet con sales y cremas artesanales, que cada día se posesionan más en el gusto de la clientela.
Motivados por la preferencia de la clientela, que gusta del sabor y la calidad de la comida que ofrece La Poblanita de Tacubaya –desde hace 75 años- teniendo como platillos emblema: los chiles en Nogada (cuando es temporada) y el mole poblano (durante todo el año), el cual por cierto ya se comercializa envasado con muy buena aceptación, es que ahora la firma le apuesta a la diversificación de su oferta, ahora con sales de alacrán y chapulín, y cremas de cacahuate y almendra.
Durante la presentación de esta línea de productos gourmet, a la prensa especializada en Gastronomía y Turismo Gastronómico, Víctor Manuel García, director de Línea de Ventas de La Poblanita destacó que tanto las sales como las cremas son el complemento ideal para cualquier preparación, llámese plato fuerte, botana, antojo o postre.
Explicó que el caso de la sal de alacrán, se trata una mezcla de sal de mar combinada con chiles (guajillo, ancho y morita), fécula de trigo, alacrán molido y una pieza de alacrán. En tanto que la de chapulín, los ingredientes son los mismos, salvo por este otro insecto. Ambas son una excelente opción de maridaje con bebidas como el mezcal y el tequila, tan demandadas en todo el mundo.
El directivo enfatizó que en la actualidad tanto el chapulín como el alacrán, se les considera como comida del futuro, sin embargo refirió que la época prehispánica, ya se consumían insectos en México, los cuales tiene un gran valor nutrimental.
En cuanto al origen de las materias primas, precisó que los alacranes proceden de granjas michoacanas, los chapulines de Tlaxcala y la sal de Colima.
Mientras que la sal condimentada, sin chile, contiene cuatro especias: romero, pimienta, orejano y tomillo. Estas sales tienen un doble uso, ya que se utilizan para marinar o como maridaje. Ideales para utilizar en la carne asada o cualquier tipo de carne: pollo, pescado, cerdo; con huevo o arroz.
Detalló que a efecto de no perder su valor nutrimental, tanto los chiles como la sal se muelen en molinos o rodillos de piedra; la fécula de trigo que no altera ni el sabor ni la proteína (insectos) se utiliza para evitar que la sal se cristalice, es decir, que se convierta en piedra. Los alacranes y chapulines son envasados manualmente.
En el caso de las cremas el directivo destacó se trata de productos veganos, sin gluten y que no contiene ningún aceite extra, es decir, que se elaboran sólo con su propio aceite, del cacahuate o la almendra, según sea el caso, conservando con ello sus propiedades nutricionales.
Respecto a los precios, enfatizó: “son de los más bajos en el mercado si se toma en cuenta que se trata de productos de calidad, elaborados artesanalmente, pero con un toque gourmet”.
Está línea de productos, que ya se pueden adquirir en presentaciones comerciales en las diferentes sucursales de La Poblanita, tiendas gourmet y en línea a través de su sitio web. -O