El subgobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel perdió las votaciones ante el brasileño Lian Goldfajn, para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) siendo su principal opositor el Gobierno de los Estados Unidos y sus países aliados en América Latina, que no ven con buenos ojos al Gobierno de la Cuarta Transformación que encabeza el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

Esquivel fue propuesto por el organismo a petición del Secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, en parte porque su presencia resultaba incómoda para la titular del Banco de México, Victoria Rodríguez Ceja, no obstante que Esquivel Hernández había sido asesor económico del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

La candidatura de Esquivel fue apresurada, ni siquiera cabildearon con los países con los que México tradicionalmente ha tenido una relación cercana, porque a Esquivel no lo conocían ni en Washington, y el aval de Ramírez de la O que el subgobernador del Banco de México tenía, fue insuficiente para convencer a los países de la región de apoyar su postulación.

AGRIA REACCIÓN DEL SECRETARIO DE HACIENDA

La reacción de Ramírez de la O fue agria y en un escueto comunicado de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) comentó lo siguiente: “Lamentamos que en las elecciones del BID continúe la política de más de lo mismo. Se eligió la propuesta del gobierno de Brasil, apoyada por el de Estados Unidos.

Agradecemos el apoyo que recibió nuestro candidato Gerardo Esquivel, por dos países de Latinoamérica. Muchas gracias”.

De este modo se confirma que la política exterior del Canciller Marcelo Ebrard Casaubón, no ha sido acertada porque con los únicos países con los que actualmente México lleva una buena relación son Venezuela, Cuba y Nicaragua, porque con los demás se ha perdido la cercanía.